La pesadilla de rosas

Autora: Renata Paredes Minga

El sol aparecía
Y tú ya estabas lastimada,

De inmensas grietas

Que dañaban tus entrañas.

Tus tierras ya no están verdes,

Se han vuelto tan obscuras

Y ahora tu gente llora

Con lágrimas de amargura.

Al cerrar mis ojos,

Empiezo a soñar,
Que debe haber alguna forma

Para poderte sanar.

Pues todos se han ido de casa

Y tú te quedas tan desolada,

Sin que haya una esperanza

De volver a ser habitada.

Tierra de mi madre querida,

Tierra linda y añorada,

Volví para verte linda y hermosa

Y te encuentro tan dañada.

Mi viejita está muy triste

Pues solo pasa llorando,

Su corazón está trizado

Como las grietas de su patio.

Atrás quedaron las fiestas,
Se mudó hasta el señor de los milagros,

Porque fue primero su casa
La que se cayó a pedazos.

Ahora en vez de rosas,

Solo quedan las espinas

Y en tus altas praderas

Hay sigsales que agonizan.

Solo queda en el recuerdo

Esta tierra tan querida,

Que alguna vez fue habitada

De familias con fuerza y armonía.

Nunca más volveré a ver

Tus hermosas propiedades,

Tus bellas costumbres
Y tu corriente en el valle.

Tus profundas grietas
Se apoderaron de ti,
Se consumieron las casas
Y las quebradas que teníamos ahí.

Espero algún día,
Que te cures tierrita linda,

Pues me has dado en mi vida

Muchísima alegría.

La pesadilla de mi Rosas,
Se expande por todo el cantón,

Dejando muchas huellas

Que rompen el corazón.

Por siempre

Autora: Stephany Morocho

Como amigo te conocí,

Como amigo te hablé,

Perdón si te lo repito,

Pero de ti me enamoré.

Llegaste un día a mi vida,

Y abriste mi corazón,

Me llenaste de amor,
Que por ti perdí toda la razón.

Acuérdate cada día,
Acuérdate cada mes,

Acuérdate cada mirada,
Que cruzamos por primera vez.

Eres mi sueño,
Eres mi inspiración,
Eres la más hermosa,
Para mi corazón.
No digo siempre cosas bonitas,

Pero soy sincero,
Que mi amor es infinito,

Simplemente verdadero.
Si tus besos fueran cárcel,
Y tus abrazos mi condena,

Serías la persona perfecta,

Para yo cumplir mi condena.
Si pudiera regalarte algo,
Te daría un espejo,
Porque después de tu carita,

Lo más linda es tu reflejo.

Por Siempre

Ni oro ni fortuna,
Nada se compara con tu hermosura,

Porque eres ese diamante,
Tan precioso y brillante.
No hay nadie más,
Nadie como tú,
Y no me voy a perdonar,
El dejarte escapar.
Te amo sin condiciones,
Te amo sin pensar en nadie más,
Te amo de corazón,
Pues es la única verdad.
Si tú me abandonas,
Mis pies te seguirán,
Si me olvido de ti,
En mi recuerdo vivirás.
Si por ti me muero,
En mi corazón te llevaré,
Y en mi mente siempre te recordaré,

Con aquella ilusión,
De verte por última vez.
Dos rosas en el agua aguantan días,

Pero mi amor por ti dura toda una vida,

Las flores piden agua,
Los prisioneros la libertad,
Yyoporti,
Espero un amor sin final.

En El Brillo De Tus Ojos

Autora: Martina Pesántez

El brillo de tus ojos a cualquiera puede deslumbrar,
Así que entiendo la razón por la que él no te para de mirar,
Si supiera lo hermosas que se ven las estrellas reflejadas en tu mirada,

Seguramente dejaría de dudar tanto en sacarte a bailar.

El brillo de tus ojos a cualquiera puede emocionar,
Porque muestra la fresca primavera,
Porque muestra el romántico otoño,
Porque refresca la memoria de aquellos que se han perdido de cariño.

El brillo de tus ojos a cualquiera puede conquistar,

Por el simple hecho de mi mirada hacer levantar,

Por el simple hecho de ser tuyo,
Por el simple hecho de ser de la noche el murmullo.

El brillo de tus ojos a cualquiera puede enamorar,
Y en aquel general me incluyo,
Aunque tal vez no sea la persona a la que se lo regalarás,

Aunque tal vez no sea yo a quien en verdad amarás.

Creo que el brillo de tus ojos,
Es decir, creo en el brillo de tus ojos,

Creo que se ve precioso con tu sonrisa,

Que es el más precioso que en el mundo exista.

Autor: Solange Pineda

Soledad

Autora: Melanie Tamayo

I
Esa injusta condena que en el camino floreció,
esa falsa justicia que en la penumbra acabó,
la desgracia de tu partida nos silenció,
y ese fue el silencio abrumador que me sentencio,

esa luz que nos alumbraba llego a su fin.
II
Quién sabe ya si en la penumbra de la noche estas ahí,

Quién sabe si esa oscuridad ya me consumió,
si la luz se apagó cuando te perdí,
quizá esa felicidad fue mi refugio
y sin el mi corazón quedo desierto,
quizás solo fue el dolor en el que me escondí,
o tal vez solo deambulo en la soledad de tu recuerdo.

III
Entre las sombras anhelo tu consuelo,
bajo tu sepulcro reclamo tu regreso,
y en alba una voz silencio solloza,
en cada pensamiento de tu muerte mi alma se destroza.

“Hipócrita adolescencia”

Autor: Joaquín Molina

I
Identidad subjetiva…

Supuestamente, exclusiva,

envueltos en mentiras;

ignorancia por alegría.
II
Nublados veo tus ojos;

pensamientos flojos y cojos.

Todos como piojos;

sobreviviendo desalojos.

III

Heteromorfa madurez,

rondando con escasez.

Jamás tendrás un después

como ilusos chimpancés.

IV
Muestras populista sabiduría.

Y alguien al fin diría…

no hay como morir en vida,

pero si cambiar de filosofía.

La esencia del “Homo Sapiens” I

Autor: Santiago Peralta

Un grupo de “homo sapiens” sin sentimientos.

“Homo sapiens”, con valores sin cimientos,
que dicen tener razonamientos,
pero sus almas no tienen ni atractivos pensamientos.

II
Si una hoja de un árbol quisiera volar,
ellos sin reproche la quisieran matar.
Y la hoja, por miedo del qué dirán,
cambiaría de rumbo hacia un potente mal.
III
Una evidente analogía, sería con aquella flor.

Expuesta ante un frondoso árbol, se torna inferior;
a pesar que brote flores de varios colores,

seguirá siendo pequeña, aunque emane diversos sabores.

IV
Pero si tú, con el tiempo analizas,
los aromas y colores, sentirás un poco las brizas;
de la flor que sigue siendo especial
y la hoja, sin escuchar, llegará a un lugar “espacial”.

Sueños tras páginas

Autor: María José Moreno

Escribimos nuestros cuentos

A través de los tiempos
Soñamos y crecemos
Como simples sujetos
Somos los verbos de la historia
Con un punto seguido y una simple coma
Los guiones del cuerpo susurran al viento
Contando a los muertos nuestros más oscuros secretos

Y perdonen, yo lo siento por no ser el protagonista

Que merece todos sus respetos,

Yo únicamente soy tu amigo el libro de los sueños.
Que hermosa algarabía que enciende mi aliento
Brindemos con ron y bailemos con las coplas de mi suelo
Y bendito sea el día en que Ángel Silva escribió alma en sus versos

Ocupando una merecida hojita en la página de los sueños

Y me voy a los cielos a contar a papa Dios
Sus más grandes anhelos, que es escribir los libros

Que contaran las historias que yo tanto quiero.

Masacre Penal

Autor: Xavier Celdas

En el manto de la noche,
desperté exaltado,
un horrendo estallido llegó a mis oídos

detonaciones y gritos se acercaban
mi compañero sollozando repetía
no hay salida,
moriremos los dos
Sus ojos oscuros brillaban de terror,
sucumbió en el piso y me puse a lloriquear,
Una gran ira se había desatado,
El amotinamiento en el bloque dos y tres iniciado

Pronto llegaría donde nos encontrábamos.
Un licuado de sangre se propagaba,
una masacre que nadie imaginaba
Yo no debería estar ahí,
yo no quería morir ahí,
Nuestro turno había llegado,
a la fuerza nos habían sacado,
Sin poder siquiera gritar,
Mi familia fue todo lo que pude imaginar
Y aquella huelga que me condenó
Todo sucedió por unos cuantos ruines con traje,

Para pedir consuelo ya era tarde,
mi muerte es inminente,
Dios me ha abandonado
Estos malditos reos me asesinaron

cortaron mi cabeza,
mi corazón se llevaron,
y en esta oscuridad que poco a poco me envuelve

me pregunto:
quién pedirá justicia por nuestra muerte
si entre criminales se hizo justicia
el que a hierro mata a hierro muere
muy pronto todos nos habrán olvidado

La vida

Autor: Carlos Reinoso

La vida es algo tan valioso
Y tan menospreciado.
Tantos planetas sin vida y continuamos la rutina

De matar a todo ser que camina.

La guerra , ¡ a cuántos ha llevado!
Y ya quieren empezar la tercera.
Ni en el fin ellos piensan, pero tarde se darán cuenta

Del final que les espera.

Meteoritos, asteroides, cometas
ya da igual la razón que interpretas.
Pues llevamos en nuestra sangre la maldad

Que avergonzó a Dios.

La destrucción nos describe,

Pues está en nuestro lema:

Si no comprendemos algo,

Lo destruimos sin pena.

Y aquí estamos de nuevo

Continuando un ciclo sin fin.

La vida trae la muerte.
Y por fin lo entendí
Disfruten lo que les queda

Porque pronto acabará;
No es una amenaza de muerte,

Sino advertencia del final.

El mundo es tan grande

Autora: Valeria Avdeeva

Pero a la gente le falta lugar,

A los que tienen el poder

Solo les importa pelear.

Algunos no tienen ni casa,

Ni formado un dulce hogar.

Muchos no tienen comida,

Ni el dinero para migrar.

Los que tienen el poder

Nunca van a sentir
El dolor y la desgracia
Y como corroe el sufrir.

Los que tienen poder tienen todo;

El control y la seguridad.
Los demás no tienen nada,
Nunca oyeron la verdad.

Lo único que escuchan
Es el disparo de las armas,

El horror y el miedo llenan

Sus inocentes almas.

Todos están asustados,
No saben qué va a pasar,

¿Que puedes tu decir? ¿

Con quién puedes hablar?

Yo solo soy una niña
Y yo no hice nada,
Yo quiero vivir en un mundo

Sin esas bravas miradas.

Tu lees sucias noticias,
Ideas llenas de odio,
Dejas tus comentarios
Sin ser tu pensamiento propio.

Tristeza, daños, heridas

Muerte y ansiedad

Siento que ya estoy perdida,

Debemos salvar la sociedad.

Misterioso cielo

Autora: Rafaela Arias

Cuando el sol se apaga,

la luna se embriaga

por sangre, llanto y tristeza

de infelices hombres

más frágiles cual pedazo de seda.

Viven en una cortina de sonrisas,

perseguidos por las sombras del pasado,

por la inmensidad del rencor,

haciendo el intento de huir del exterior.

Poco a poco se apagan junto al sol,

sintiendo sus almas marcharse

junto a las necias mujeres a las cuales

algún día juraron amor.

Las flores se mueren, al igual que sus risas,

y es la muerte la cual cumple sus dichas

de extender sus almas en el misterioso cielo.

OL VIDO

Autor: María Paz Vera
¿Cómo piensas recordarme?
¿Acaso será ternura?
O prefieres verme entre los bosques, la hierva y la tela verde,

tela verde que forma el pañuelo de Dios.
Tela demasiado oscura que nace uniforme
en la bóveda del tiempo.

Tengo hoy la dicha de verte,
más cargo transparente ante tus ojos,

¿Acaso al fin me olvidaste?
Corazón mío.
Asombra a veces lo que hice,
para dejar que vivas.

Todo queda atrás,
se evapora con el tiempo.
Las cercanías, la noche y tu mano,

quisiera a gritos que escucharas.

¡Ya olvídame por favor!

No soy la hierba, ni la lluvia, ni las estrellas,

no soy parte del pañuelo de Dios,
tampoco tengo corazón de madre,
ni estoy presente en tu voz.

Soy, solamente un recuerdo,

de una muerte fugaz.
Te repito amor mío.
¡Ya no me recuerdes más!

Lo que se quiere callar

Autora: Tamara González

Una niña inocente en una sociedad dañada,
lo que a su ser levanta, va muriendo en la mañana.

La decepción un vacío en ella causó,
más siempre se levanta con una sonrisa en la cara.

Ella pasa como un ave enjaulada.
Y aunque ella vive, y aunque ella sigue,
y aunque tenga esperanza, siempre sola danza.

Sus verdaderos colores quiere mostrar

pero todas sus luces quieren apagar.

Sus pensamientos quiere callar
y a sus sentimientos invalidar.

¿Y cómo lo logrará viviendo en un mundo cuadrado?

¿Y si se siente apagada, cansada, vacía y agotada?

¿Y si solo quiere a alguien que se quede a su lado?

¿Por qué no somos algo más?

Autora: Martina Rosero

Antes mi corazón solo dormía,
y llegaste tú, mi nueva compañía,
y lograste darle sentido a mi vida,
un amor como el nuestro nunca se olvida.

Tú eras la persona en la que más confiaba,
tú eras la persona que me cambió en un instante,

tú eras la persona a la que más amaba,
tú eras la persona que me sacó adelante.

Si tan solo me vieras distinto todo sería diferente,
si tan solo tus ojos se fijaran en mí todo sería diferente,

de tanto esperarte ya han pasado mis años,
y tras tu despedida sólo me quedaron los daños.

¿Para qué me hago ilusiones?
Estarás en mi corazón hoy, mañana y siempre,
desde que te fuiste me he enterrado en un mar de desilusiones,

eres imposible de sacar de mi mente.

Los versos a mi amado no pueden esperar

Autora: Heidi Castillo

Aquellos sonidos en mi habitación vuelven a resonar,

Los latidos de mi corazón retumban sin cesar,
¿Será Beethoven que me vino a visitar?
¿O Chopin que me quiere conquistar?

¡Vaya que el sereno de esta noche me permite fantasear!

¿En dónde estás Neruda? que te quiero enamorar,
Pero los versos a mi amado no pueden esperar
Así que pongámonos a redactar.

Pronto amanecerá y mi algoritmia no se puede controlar,
La frecuencia de mi palpitar
Sabe que mi algoritmo debe cambiar
Pero el diván se está empezando a calentar y mi cuerpo a enfriar.

He hablado con la luna,
Le he pedido ser la reencarnación de Picasso
Para que seas mi musa,
y pintar cada parte de tu silueta bajo la luz del acaso

Te he buscado en millones de fotografías

Y hasta en nuestra última melodía.

Llevo horas escuchando la misma sinfonía

Para poder recordar aquel día.

Te he buscado tanto y no te he encontrado

Cuando llegará aquel día
En el que vuelvas hacer parte de la vida mía

Y no seas tan solo un recuerdo.

Me has dejado un poco herida,
Mi mente grita: ¡tú aun no lo olvidas!

Y mi corazón se encuentra en agonía.

Empiezo a sentir como mi vaho se desvanece cada vez más.

Tus recuerdos pronto colapsarán
Es algo que no puedo evitar
Pablo Neruda ¿dónde estás?,

los versos a mi amado no pueden esperar.

J24

Autora: Mariana Saavedra

Mi alma se tintó de azul
Mi mente se llenó de nubes
Mi piel se llenó de rubíes
Mis oídos se llenaron de mariposas

Mi boca se llenó de sus palabras

Que sentimiento generan los recuerdos

Son como torbellinos de adrenalina

Que se transforman en nostalgia

Que se transforman en agonía

Nuestros ojos de estrellas no son los mismos

Nuestras miradas están apagadas pero llenas de tormenta

A veces por segundos las enlazamos con la luna

Pero desaparecen con la marea y su libre espuma

Ahora sus palabras son silenciosas
Solo se escucha la muerte de mil mariposas
Y el silencio se ha vuelto bastante ruidoso

Hace que mi cuerpo se sienta tembloroso
Mi corazón se ha vuelto un mentiroso

Convenciéndose que eso era una melodía de gozo

Cuando realmente sólo lo guía a su eterno reposo

Después de todo, abrí una joyería
Rubíes, esmeraldas y zafiros, todo se vendía
Sin embargo, sentía que una sombra me seguía

Siempre presentía que algo malo sucedería
El desenlace pasó, un sol se incrustó en mi pulmón

Únicamente percibía como mi organismo en cenizas se volvía

Para después volar con la brisa de pequeños sollozos

¿Cómo vivir mil vidas?

Autor: Danna León

Una odisea encarnada, como una historia narrada
Por aquellos que la desentrañan
Aventura que avanza y la pluma que rasga
Sobre las lágrimas de una árbol que se desvanece en el tiempo

En sus frases los sentimientos surgen como una ola en un mar en calma

En el los sueños se viven y se sueña la vida
Y de sus páginas brotan alas que nos llevan a lugares inesperados

Que de la mente de una autor surgen con un mundo nuevo

Aunque no siempre es fácil el camino

Sigue y no pares, no te rindas, lucha

Que ser astuto como un lobo es una ventaja

Que “nada” es imposible si lo intentas

Así encuentras luz en este pozo oscuro

Así sientes lo que siente un lector

Así vives mil vidas

Delirios

Autor: Sofía Dutan

Con las gotas de la lluvia

Con el sonido de la brisa

Tu recuerdo a mí me abruma

Mientras pienso en tu sonrisa.

Mientras miro a la ventana

Esa tan triste y desolada

Solo pienso en la salida

Que tú diste de mi vida.

Tus palabras tan hirientes

Que me lastimaron como daga

No son nada comparadas

Con tu ausencia en mis charlas.

¿Cómo fue que te marchaste sin darme explicación?

Si por ti yo di la vida
Y te abrí mi corazón.

Pero, aun quiero que tú sepas

Que, aunque quiera yo odiarte

Y borrarte de mis recuerdos

Tú fuiste la forma más bonita de perder mi tiempo.